Determinación, equilibrio y una gran sonrisa, son algunas de las características que más podemos encontrar en Cristy Romero, psicóloga de formación y actualmente Presidenta de la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias en Durango. Recién recibió la investidura de Doctor Honoris Causa por el Claustro Doctoral Honoris Causa. Cristy nos cuenta cómo ha logrado equilibrar el ser madre con su vida empresarial y la responsabilidad de representar a grandes mujeres en su gremio. ¡Conócela!
¿En este momento de tu vida, quién es Cristy Romero?
Soy una mujer muy segura de sí misma, disciplinada, y a quien le gusta cumplir su palabra; lo que digo, lo hago, si te doy un “sí” o un “no”, es definitivo. En mi día a día disfruto mucho levantarme temprano y leer un poco, sobre todo autores que se dedican al tema de las emociones y de la mente. Me gusta mucho seguir y escuchar a personas de mentes muy inteligentes que han desarrollado en el tiempo historias y aprendizajes que nos pueden compartir para seguir creciendo como mujer. En Casa me gusta tener libros en diferentes espacios, al estar en ella, me gusta sentarme tomar un libro y leer, hacer mío lo que me gusta para continuar creciendo.
¿Cómo recuerdas tu infancia?
Fui una niña muy feliz y deportista: taekwondo, atletismo, basket ball etc. Cualquier deporte fue de mi interés hasta la fecha. Mis papás eran muy dedicados a nosotros, mi mamá siempre estuvo muy al pendiente y nos enseñó a hacer las labores del hogar, como cocinar. Aunque en un inicio no me gustaba tanto, lo hacía, pero sin mucho interés era más el temor de no hacerlo bien, que otra cosa. Cuando me casé aprendí con el tiempo a facilitarme la vida en ese sentido. El ver cómo los demás disfrutan algo que realizo para ellos, me provoca alegría y disfruto. Hasta la fecha tenemos la tradición en casa de comer juntos a la misma hora.
¿Cómo logras hacer tan buen equipo con tu esposo?
Hemos hecho equipo desde siempre. Desde que nos conocimos, empezamos a soñar, a hacer esa mancuerna y yo creo que somos un balance. Entre que yo soy una mujer aterrizada, de estructura y prefiero seguridad, a él le gusta tomar riesgos y aventurarse, de pronto si la balanza se carga mucho a un extremo, el otro puede compensar y nos brindamos mutuo apoyo.
¿Qué es lo que te ha enseñado el ser madre de cuatro maravillosos hijos?
No bueno, ¿Qué te digo? Yo me caso de 18 años, imagínate: una chavita que está enamorada de su novio y ahora esposo. ¡Te comes la vida! Cuando nos enteramos que seríamos padres, fue una gran emoción, pues no piensas en que le tienes miedo a ese reto, disfrutas tanto… y yo tengo 4 hijos que han sido maestros de vida, prácticamente estás madurando tú junto con ellos, a la par de estarles educando. No es nada fácil, ahora yo veo hacia atrás en el tiempo y me doy cuenta que por esa misma juventud, pude afrontar los retos como mamá. He sido una mamá a quien le ha gustado superarse, aprender, y acercarme a pedir apoyo cuando fuera necesario. Todos mis hijos son muy, pero muy extremos, ¡Era todo un reto salir de vacaciones! Ellos me han inspirado y ayudado a vencer miedos… Tan así que una de las experiencias más espectaculares que tuve fue hacer salto en paracaídas con tres de mis hijos desde un avión.
En tus palabras, ¿Cómo se logra equilibrar la vida familiar y personal con el área empresarial?
Mira, en lo particular siempre he tenido claro que mi prioridad es la familia, entonces nunca pierdo esa perspectiva. Hacemos cosas, tenemos nuestros proyectos y atendemos la empresa con todo lo que eso implica. Pero la parte de dar atención a la familia y darle su tiempo se fundamenta en las rutinas con mis hijos y pareja. Para tener ese equilibrio que me dices, el mayor reto es tener la claridad de trabajar tu espacio personal, tus emociones y tus pensamientos. Eso ha sido prioritario para nosotros, para poder afrontar los retos que hemos encontrado a través del tiempo. Ha sido una tarea familiar, buscamos siempre acomodar esta parte emocional y cuidar de la salud física y mental.
¿Cómo se promueve el liderazgo femenino desde AMEXME?
Siendo una asociación que agrupa mujeres empresarias y emprendedoras, nos interesa nuestro crecimiento personal, recibimos mentorias muy orgánicas entre nosotras, desde la observación o entablar comunicación, nos cuestionamos y queremos aprender de cada una, “cómo lo hizo o lo logro”, cómo afrontan sus retos y las decisiones que toman. Nos vinculamos entre nosotras, no sólo en Dgo., sino a nivel nacional. Estamos creando. Somos mujeres que a través de lo que AMEXME nos da, vamos a nuestras empresas y empezamos a crear desde corto a largo plazo la meta. Entre todas nos inspiramos y tomamos ideas para ir crecimiento personalmente y en el giro particular, La asociación cuenta con asociadas del ramo de servicios, turismo, alimentos, ecoturismo, belleza, salud entre otras. Entonces, en esa diversidad cada una toma lo necesario para sí. Vamos creciendo mucho, y es un reflejo muy grande el ver cómo nosotras mismas vamos rompiendo esos paradigmas; y eso es muy personal, porque mis paradigmas no son los mismos que los de las demás, las necesidades de un giro no son las mismas que del otro, y cada una en eso toma lo suyo, lo que le va ayudar a crecer. Por ejemplo, hay empresarias que ya están buscando posibilidades internacionales. Cuando las voluntades se unen, todo se puede lograr.
¿Cuál consideras que es el reto actual en el panorama de una mujer empresaria en Durango?
El reto más grande que he identificado es el ser independientes Financieramente.. En nuestro estado un alto porcentaje de empresas depende del servicio que presta a gobiernos, por lo que el reto mayor es buscar nuevos clientes, sino nos damos a la tarea de resolver este tema de crea un freno financiero y tus recursos están en manos del cliente y no en tu empresa. El reto se los últimos tiempo El que los negocios los puedas hacer en el sector privado es una tarea ardua porque tienes que realmente trabajar y estar metida en esa vinculación con otros empresarios, participar en una agenda que te lleve a hacer esos vínculos, a visibilizarse. Si no te vemos, ¿cómo te vamos a consumir? Es importante tener la capacitación suficiente para que puedas identificar qué necesita tu negocio. Las mujeres que sí quieren salir de su caja de confort, están siempre presentes en cada lugar que les dé la posibilidad de capacitarse para afrontar cada reto que llega.
Considerando tu camino, ¿cómo defines el éxito comparado a cuando comenzaste?
Para mí, el éxito es ir dejando huella. Viéndolo desde el liderazgo que ejerzo en AMEXME, es ir haciendo que otras mujeres crezcan. Siempre lo voy a repetir, porque es mi visión y forma de ver la vida. Imagínate, ¿qué me ha dado a mi AMEXME? A través de lo que yo doy, he recibido. Mi objetivo mayor es crecer juntas como grupo, ya que damos nuestro tiempo y compromiso. Es por eso que para mí es importante la palabra. Es muy gratificante cuando recibes un mensaje diciéndote “lo has hecho muy bien, has representado muy bien a AMEXME”. Siempre he tenido claro que hacer las cosas con cariño, dedicación y siento orgullo, al igual desde que fui mamá, lo más importante es que tu hijo siempre se sienta orgulloso de ti, que se sienta respaldado por lo que tú eres. Como mamá es lo primero que yo cuido. Te sientes respaldada por quien está liderando. Eso es algo muy importante para mí, el cómo hacen sentir tus acciones a las demás personas.
¿Cómo cuidar de la salud mental siendo empresaria?
Tenemos que aprender a levantarnos de cada caída, y saber que viene algo mejor, que siempre esas caídas, son para renovar fuerzas, creatividad, todo… porque ya no vas a hacer lo que no te funcionó. El mundo de los negocios es como esa danza, vas bailando todos los días, y le vas modificando el paso, vas poniendo y quitando cosas, otras simplemente no funcionan y es aprender a soltarlas. Esto implica que nuestra mente a través de cada pensamiento sea fuerte y resiliente para vencer cada reto. El pilar de una empresa eres tú misma.
Finalizando con broche de oro: ¿Qué consejo final nos puedes obsequiar para nuestros lectores?
La congruencia con tus pensamientos, con tus emociones y con tus acciones. Que seas congruente en tu vida es el placer más grande que un ser humano puede disfrutar.